Ya estoy aqui, aunque he estado un poco vaga y no he escrito. estoy un poco triste por todo lo de Japon. En agosto pasado estuvimos en Tokio, Kioto, Osaka y Nara. Lo mas flipante es que te crees que solo hay ciudades, pero hay por todos lados maravillosos bosques de cedros milenarios. Estuve en el monasterio de Nikko, el del friso superconocido de los 3 monitos: no oir, no hablar, no ver. Tambien me monte en el tren bala, es alucinante verlo pasar cuando estas esperando en el anden (a una distancia prudencial, por supuesto).
Los japoneses son amables, educadisimos, y los jovenes son cada vez mas altos, nada de bajitos. Las chicas van vestidas como si fueran muñecas, con un punto de lolitas. Lo extraño es que en el hotel que estabamos, cuando fuimos a la piscina nos taparon los tattoos a mi hijo y a mi porque esta mal visto; pero todos los jovencitos los llevan, aunque el hotel era mas bien clasico.
En Kioto vimos autenticas geishas, andan como si flotaran y algunas son guapisimas y muy elegantes.He mandado un correo a la guia, que se llama Reiko, para ver como estan ella y su familia, por si les ha afectado el terremoto, pero no me ha contestado aun.
Japon es un gran pais, capaz de renacer de sus cenizas tras la 2ª Guerra mundial; espero que ahora tambien lo consiga.
Los japoneses adoran todo lo español, con deciros que en la direccion de Reiko utiliza el nombre de Maricarmen, que es como la llamaban cuando estudio aqui español.
Ojala mi proximo blog sea con buenas noticias de Japon. Tambien os dare mi magnifica impresion sobre Lisboa.
Ah!, para el shopping Japon es carisimo, mejor ir a Hong Kong, donde me traje algunas im itaciones, como un bolso de Juicy Couture o un fulard de Louis Vuitton, muy conseguidas, y Lalo se baño en una playa en la que advertian sobre el peligro de los tiburones y la zona estaba cercada con unas mallas.
Hasta pronto: VITO.
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